por el cual nuestra memoria
desprecia la tragedia ajena.
Ser comunista por esto mismo implica
no desfallecer jamás
ante la inercia del olvido,
ni ante la obviedad inducida
del estado de las cosas.
Ser comunista implica
no dejarse estafar por las guirnaldas
ni por los fuegos de artificio.
Es un duro trabajo
que requiere mucho amor
y una impermeable disciplina:
la disciplina de la dialéctica
y la del latido.
R. de M. 6/6/2013
me parece la mejor presentación, te define por todos tus lados: gran artista, gran pensador, gran amador tanto en infinitivo como en gerundio. Enhorabuena. Disfrutaré de cada entrada...
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